Cómo explicarte lo que es el orgullo, si no bajaste a Segunda División y lejos de abandonar el barco, te pusiste de capitán y animaste más que nunca a tu equipo para devolverle donde se merece, por historia, estar.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si no has perdido dos finales en el campo, pero las has ganado en la grada. Si el equipo rival celebraba su triunfo bajo la banda sonora del himno del Atleti.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si solo con ver a los jugadores que defienden las rayas que amas te has cansado. Si no has sufrido con cada presión al límite de Gabi, no has vibrado con cada parada de Coutois y no te has tensado con cada mano a mano de Diego Costa.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si no se te eriza el pelo cada vez que cantas el himno de tu equipo. Si no te abrazas con alguien desconocido cuando cantas un gol en el Manzanares.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si no vives el día a día la marginación a un equipo glorioso en beneficio de dos equipos masificados.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si no diferencias por la calle al que es atlético del que no. Por su forma de andar, su forma de mirarte.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si celebra que un tío que arrastra el escudo que amas por el campo renueva llevándose 20 millones de euros. Si pones precio a tu orgullo.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si no sientes que la derrota es un dolor momentáneo que da paso a un sentimiento mayor.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si no disfrutas cada victoria como si fuese la última. Si sólo te merece la pena el destino sin haber disfrutado del camino.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si tu único fin es ganar, más allá de cómo venga. Si eres capaz de odiar o amar a tu equipo dependiendo del resultado.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si estás viendo un partido del equipo que llevas en el alma y no le alientas cuando lo está pasando mal. No le das tu fuerza para levantarse.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si cuando te preguntan por qué eres de tu equipo y sólo sabes decir que es el mejor. Que gana. Y que tiene muchos títulos.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si no estás nervioso el lunes por la mañana para el partido del domingo,
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si sólo vives los partidos grandes y te olvidas de la emoción de los pequeños.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si tienes tu bufanda en un cajón cogiendo polvo y sólo la sacas para ir a celebrar lo que otros han ganado por ti.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si no te has rehecho de los golpes que te va dando la vida. Si no te has levantado nada más caerte. Si no valoras lo que tienes, por muy pequeño que ello sea.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si odiamos a nuestra directiva corrupta y tú amas a la tuya, como el que quiere más a papá que a mamá porque le compra más juguetes.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si cuando pierdes estas como ausente y cuando ganas estas como insoportable.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si no eres del Atlético de Madrid. Si no luchas como hermanos defendiendo sus colores. Si no derrochas coraje y corazón.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si para ti lo es ganar 10 Copas de Europa mientras que para mí es amar a unos colores en Primera o en Segunda División. Cantar igual un gol al Betis que al Chelsea. Hacer kilómetros en autobús para ir a una Final de Champions que para visitar al Levante.
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si tu eres tan «como no te voy a querer si fuiste campeón de Europa» y yo tan «y más te aliento, si vas perdiendo. Un sentimiento, no traten de entenderlo».
Cómo explicarte lo que es el orgullo, si ganar es tu meta mientras que la mía es amar.